El Poder de Volver a Empezar

¿Quién no ha sentido alguna vez que después de un cambio importante en su vida, todo se derrumba, como si fuera una caída de naipes?.

No subestimes el poder del inicio. 

Podemos referirnos a un divorcio, separación, retiro laboral, mudanza, cambio de escuela o universidad, enfermedad o un fallecimiento.

Son muchas las crisis que podemos pasar los seres humanos, que representan cambios importantes en nuestras vidas.

Se presentan situaciones que manifiestan una alteración de vida rotundo, necesario y radical para el resto de nuestros días.

La religión nos enseña a percibir lo que consideramos malo como una 'maldición', un 'castigo'. Sin embargo, todo depende del sistema de creencias que tengamos, del enfoque y expectativas de la vida que desarrollemos en el camino.

Mientras haya vida, siempre habrá tiempo para empezar.

Los 'quiebres' nos llevan a buscar mecanismos de autodefensa que nos permiten salir adelante ante las diferentes situaciones, entre ellos están:

👉 Tomarnos de la mano del Dador la Existencia, el cual nos otorga y enfoca en un propósito de vida. Nos permite reconocer que, agarrados de Él, no habrá miedo de transitar este mundo.

👉 Vivir cada instante, no como si fuera el último, pero sí como una oportunidad más que necesitamos para levantarnos y ejecutar todo lo que no habíamos logrado antes, porque entendemos que este es el momento para hacerlo.

👉 Saber que en ese proceso de transformación absoluta lo más seguro es que quienes estuvieron en el pasado, no estén en el presente y quizás, quienes estuvieron en el presente, no estén más en el futuro.

No obstante, importante son aquellas personas vitamina que nos impulsan porque reconocen esos dones, talentos y habilidades otorgadas por el Creador en su Inmensidad, no esperando que caigamos, sino más bien, nos catapultan a realizar todo lo que debemos en el tiempo que corresponda.

👉 Evitar buscar fórmulas mágicas o gurús que te instruyan en cómo debes empezar. No existe magia a la hora de practicar la autorreflexión y colocar en orden nuestras ideas. 

Los expertos pueden ayudarnos, los profesionales pueden guiarnos, los verdaderos amigos pueden apoyarnos, pero siempre habrá una última decisión que es la que está en nuestras manos tomar.

Los inicios no son tan malos como parecen, quizás sean mejor de lo que todos esperamos, porque ellos indican la culminación de un ciclo para darle curso a uno nuevo.

Empezar una vez más nos permite organizar ideas, trazar objetivos, cambiar de actitud, afrontar la vida, valorar la originalidad, ser coherentes entre lo que pensamos y actuamos, nos impulsan a ser una versión mejor que la lograda en el pasado.

¿Cómo han sido tus inicios? ¿Qué has aprendido de ellos?.

Siempre será un buen momento para empezar

Sania Arroyo

Autora